Protocolo de actuación genérico de Terapia de Pareja. -Los problemas de pareja pueden ser de muchos tipos: celos, distanciamiento por distintos motivos, la llegada de los hijos, comunicación poco fluida, infidelidad… cualquiera de estas áreas puede ocasionar crisis que conlleva mucho sufrimiento en el día a día, al ser la convivencia con la otra persona uno de los aspectos vitales más importantes.
El proceder habitual en una terapia de pareja es el siguiente:
Sesión conjunta con ambos miembros de la pareja: la pareja expone a la psicóloga su situación y la psicóloga extrae las primeras conclusiones y visión de la misma.
Sesiones individuales (una para cada uno) con cada uno de los miembros de la pareja: estas sesiones les da la oportunidad de expresar por separado sus inquietudes, sus necesidades, su visión de la vida en común, sus expectativas, etc.
Sesión conjunta y comienzo de la terapia propiamente dicha: por nuestra experiencia ya a partir de la tercera/cuarta sesión conjunta se está tomando decisiones.
No existe un único protocolo de actuación, el que se plantea a continuación es un ejemplo base:
FASE 1: Primer contacto de uno o ambos miembros de la pareja con el psicólogo. Entrevista, en este encuentro se plantea la situación y se resuelven todo tipo de dudas sobre la terapia, así como con esta primera información el psicólogo ofrece una primera valoración.
FASE 2: Entrevistas individuales por separado. Cada uno puede así mostrar su punto de vista sin ser juzgado por el otro miembro, de esta manera el psicólogo puede ir formando unas conclusiones.
Fase 3: Sesiones conjuntas con ambos. En estas sesiones es en las cuales comienza el tratamiento y se ponen en práctica las técnicas. Identificación de pensamientos, exposición de creencias negativas, exposición de situaciones pasadas, entrenamiento en solución de problemas, normalización de pensamientos…
Fase 4: Sesión de conclusión. Después de escuchar las conclusiones del psicólogo la pareja podrá tomar varias decisiones como continuar utilizando las técnicas practicadas, continuar con la terapia, una ruptura armoniosa o darse un tiempo de reflexión para tomar estas decisiones.
Si notas que relación de pareja ya no es lo que era antes…
Si has decidido ponerle fin a vuestros problemas…
Si deseas restablecer el vínculo que siempre habéis tenido…
Si lleváis un tiempo que, aunque os amáis, no encontráis la felicidad en la pareja…
Si discutís mucho y no sabéis cómo gestionarlo…
Si vuestro miedo al abandono, al rechazo, a la frustración o a la soledad no os dejan disfrutar de la relación en pareja
Si ha habido un cambio importante en la relación y no lo podéis gestionar (os habéis ido a vivir juntos, habéis sido padres, un nuevo trabajo…)
Si la convivencia se ha vuelto aburrida y tenéis miedo que vaya a más
Si los celos no os dejan vivir en paz la relación de pareja
Si no podéis recuperar la confianza por causa de una infidelidad o por otras cosas que han dañado la relación.
Si el pasado os pesa tanto que no os deja ser felices
Si tenéis un problema sexual
Si los conflictos de pareja os ahogan y no llegáis a gestionarlos
Si la comunicación en la pareja es mala y las discrepancias os parecen insalvables
Si sentís que no estáis viviendo vuestra vida en pareja intensamente
Si tenéis miedo al compromiso y os afecta en la relación